ETNOGRAFÍA DE ORBAICETA (Parte 2 de 4)
POR Mª CARMEN MUNARRIZ ELIZONDO
CULTURIZACIÓN
1.- CUIDADO, ALIMENTACIÓN Y ENSEÑANZA DE LOS NIÑOS
Generalmente, eran las madres las que se encargaban de los
niños aunque, cuando iban al campo, se encargaban las abuelas en el caso de que
las hubiera y sino, las tías solteras que todavía estaban en casa. Actualmente,
continúa esta costumbre, aunque hay familias que viven aisladas del resto del
clan.
2.- APRENDIZAJE DE LA LENGUA
Por las informaciones recibidas, se les enseña a decir: “aita,
ama, agua, leche, etc”. Sobre todo, cosas sencillas al principio y luego alguna
oración y a santiguar. Entre estas oraciones: “Jesusisto de mi vida”, “Bendita
sea tu pureza” y el “Padrenuestro”.
3.- INSPIRACIÓN DE SENTIMIENTOS DE REPULSA
Tanto antes como ahora, se les decía: “Pum, pum”, para que
tuvieran cuidado con las escaleras; “¡Ixi!”, para que tuvieran cuidado con el
fuego; “Kaka da hori” para que no se llevaran nada malo a la boca, o sino “Gaiztoa
da” “Es malo”. También se les decía “Ez da ukitzen hori” (“eso no se toca”); “Rtxitela
hora fan, pekatua da hor pasatzea” (Batua: “Ez zaitezkela hora joan, pekatua da
hortik pasatzea”. Castellano: “No vayas ahí, es pecado pasar por ahí”). Se les
decía también que no debían jugar con el fuego porque se iban a mear. Todas
estas cosas se acompañaban con gestos de pegar y se les asustaba diciéndoles: “que
viene el kokón”, “que viene el guau guau”, “que viene la bruja”, “que viene el
Sacamantecas”. A los que fueron niños después de la guerra, se les asustaba con
los mendigos, pues había muchos de ellos que pedían por las puertas.
4.- INICIACIÓN DE LOS SENTIMIENTOS DE AMOR Y CARIÑO
Se les enseñaba a obedecer a los padres y a los mayores, se
les decía que tenían que querer a sus hermanos, se les enseñaba a besar a sus
hermanos y a sus padres: “Eman da xoxu apa anaiaria” (Batua: “Eman ezaiozu apa
anaiari”. Castellano: “Dale beso a tu hermano”). Se les enseñaba a pasar la
mano por la cara de la madre; actualmente se hace lo mismo.
A los niños, según los informantes, se les habla en zuka,
pero suavizado y cariñosos por medio de la palatalización. Actualmente se les
enseña a hablar en “tú” en castellano, aunque hay ejemplos de hijos que hablan
de “usted” a sus padres.
5.- REPRESIÓN DE LOS INSTINTOS
Se les dice “Eso no se toca” (“Ez da ukitzen hori”), “eso es
caca”, “eso es pecado”, “eso no se dice”. Actualmente se sigue haciendo así.
6.- LECTURA Y ESCRITURA
Todos los informantes han respondido que les enseñaban a
leer y escribir en su casa.
7.- 8.- INSTRUCCIÓN RELIGIOSA Y MORAL Y COSTUMBRES
RELIGIOSAS Y MORALES DE LA FAMILIA
Estas preguntas pueden agruparse en una, puesto que, según los
informantes, todos los niños participan desde pequeños en las prácticas
religiosas de la familia.
De niños se les enseñaba a santiguarse, el Padrenuestro, el
Ave Maria, el Gloria, el “Jesusito de mi vida”, “Bendita sea tu pureza”, etc.
Se les daba a los niños –siempre según los informantes- las enseñanzas de los mandamientos.
Tenían que decir “Ave María Purísima” siempre que volvían de la escuela y
también tenían que decírselo al cura cuando le veían por la calle, a la vez que
le besaban el anillo. Tenían que rezar al levantarse y al acostarse. Tenían que
bendecir la mesa, ir a Misa y al Rosario todos los días, así como al Catecismo.
Las niñas llevaban mantillas a Misa y al Rosario. Se rezaba el Rosario todos
los días en casa, por lo menos en octubre, que es el mes del Rosario. El Angelus
se tocaba tres veces al día: al amanecer, al mediodía y al anochecer. En casa,
el Angelus se rezaba al mediodía y a la noche, cuando se oían las campanas. Si
se oían en el campo, había que dejar el trabajo y rezar. Todos los domingos,
tenían que ir a Misa primera o Mayor. La Misa primera era a las siete de la
mañana en invierno y a punto del amanecer en verano. Los domingos por la tarde
iban a las Vísperas y al Rosario.
Los domingos no se trabajaba y, hasta hace
pocos años, estaba mal visto que se tendiera la ropa para secar, por ejemplo,
por ser señal de que se había hecho un trabajo en domingo. Otra práctica
religiosa común hasta hace pocos años era que, cuando había un difunto, iba
todo el pueblo a rezar el Rosario a casa del difunto y delante de él, Rosario
que –en general- era rezado por los niños. En cuanto a los símbolos religiosos,
según los informantes “la gente pudiente” tenía el Sagrado Corazón sedente y
además se tenían crucifijos, rosarios y cuadros de santos: Angel de la guarda,
Virgen con el Niño, San Antonio, el Santo Cristo, medallas, estampas, libros de
Misa, etc.
Además de esto, había una imagen de la Sagrada Familia que se
llevaba una semana a cada casa. En caso de que en una casa hubiese un enfermo,
se dejaba allí todo el tiempo que hiciese falta.
También había en las casas un trozo de pan bendecido el día
de San Blas, que servía para el mal de garganta, la vela bendecida del Jueves
Santo, un ramo bendecido que se ponía en las ventanas o en las puertas y que
servía para evitar el rayo.
9.- TRABAJOS EN QUE SE INICIAN LOS HIJOS
Los más habituales eran traer leñas para el fuego, traer
agua cuando no había agua corriente, hacer los recados (los de la segunda
generación hacían recados a las vecinas por un trozo de pan o un trozo de
chocolate; los de la tercera generación, lo hacíamos por una peseta), lavar
pañuelos las niñas, poner la mesa, recogerla, secar los cubiertos, ir al campo
con el ganado. Cuando eran un poco mayores, iban delante de las vacas o de los
bueyes en el campo, o picando el surco con la azada.
Algunos de estos trabajos ya no se conocen en la actualidad.
10.- SANCIONES
Según los informantes, les pegaban con la mano, con la
zapatilla, con una rama, con el látigo que se tenía para los hatos, se les
ponía de rodillas, se les hortigaba, etc. En general, eran las madres quienes
aplicaban estos castigos y su motivación era “si se lo merecían”.
ESCUELA
11.- ESCUELAS Y POBLACIÓN ESCOLAR
Había una escuela unitaria para niños y niñas (Foto 6). En
el barrio de la Fábrica había otra. Después de la guerra hubo una separación de
sexos, poniendo una escuela para niñas con una maestra y otra para niños con un
maestro.
Actualmente vuelve a ser unitaria.
La población escolar era entre 40 y 60 niños y niñas, antes
de la guerra, y ha ido descendiendo hasta llegar a los ocho niños actuales.
12.- INICIACIÓN DE LOS ESTUDIOS
Antiguamente, como ahora, se empezaba a los seis años.
13.- ENSEÑANZAS QUE SE IMPARTEN
Antiguamente, en la escuela aprendían a leer, escribir y “las
cuentas”. Más tarde, aprendían las cuatro reglas, la raíz cuadrada y cúbica,
problemas de interés simple y compuesto, gramática, historia sagrada, historia
de España, la Enciclopedia, dictados, quebrados, etc.
El horario de clase era, antiguamente, de las 8 a las 12 y
de 2 a 4. Más tarde era de 10 a 1 y de 3 a 5, igual que ahora.
Tenían libre los jueves por la tarde y clase los sábados por
la maána. Las vacaciones eran en Navidad, Semana Santa, verano y Carnavales.
Después de la guerra, se suprimieron las vacaciones de Carnaval.
Los informantes más ancianos afirman que dejaban la escuela
a los 12 años, aunque esto dependía de las necesidades de casa: si necesitaban
al niño para trabajar, lo sacaban de la escuela aunque no tuviera la edad.
Había clase por la noche, en el invierno, para los niños que de día trabajaban.
Posteriormente los niños salían de la escuela a los 14 años, aunque también la
dejaban antes si no podían por el trabajo.
14.- LA EDUCACIÓN EN FUNCIÓN DE LOS SEXOS
Se les enseñaba las mismas materias a niños y niñas, salvo
que las niñas aprendían labor por las tardes. Al principio, solamente se les
enseñaba labor un día a la semana y después, todas las tardes.
15.- PROCEDENCIA DE LOS MAESTROS
No se recuerdan.
16.- 17.- LENGUA VERNÁCULA
Las enseñanzas se impartían en castellano. Todos los niños
sabían euskera aprendido en sus casas, y más tarde aprendían el castellano en
la escuela, hablándolo entre ellos, como si fuera un juego. Posteriormente, se
fue perdiendo el euskera, aunque en la actualidad hay niños que lo vuelven a
hablar por estudiar en ikastolas y, si no lo hacen con sus padres, practican
con sus abuelos.
No existieron problemas de bilingüismo hasta los años 60.
18.- ORIENTACIONES RELIGIOSO-MORALES
Los niños tenían que decir “Ave María Purísima” al llegar a
la escuela, y rezaban antes de empezar la clase. Cuando terminaban la clase
tenían media hora de “doctrina” o Catecismo. Tenían que ir a Misa y al Rosario,
y el maestro solía ir con ellos y vigilaba para que no faltara ninguno.
19.- SANCIONES
Les pegaban, les ponían de rodillas con los brazos en cruz y
con libros en las manos, les castigaban sin comer, les echaban de la escuela,
los ponían en un rincón mirando a la pared, les sacaban al pasillo, y les
pegaban con una vara en las manos y en la espalda.
Continuar a la tercera parte de Etnografía en Orbaizeta
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