DOCTRINA INMANENTE ACEPTABLE.- EL
UNIVERSAL DIRECTO Y EL UNIVERSAL REFLEJO.- Volvemos a lo que hemos expuesto en
lecicones de este Tratado y a la distinción entre el plano de los conocimientos directos y el de la reflexión.
El alma percibe, por la
sensibilidad y la mente, las externas realidades; pero, así como cada sentido
percibe una cualidad sensible, prescindiendo
de las demás y de la propia materia, el entendimiento prescinde de todas las
condiciones individuantes, quedándose con la desnuda esencia de la cosa. Ese concepto, así elaborado, es el universal directo; que es universal en un sentido restringido, como veremos.
Luego, reflexionando y volviendo sobre este concepto, lo considera como algo uno, que puede hallarse realizado en muchos individuos posibles,
o se realiza ya, en muchos individuos existentes, a los que esa esencia dice relación. Y a este concepto se llama ya universal reflejo.
DIFERENCIA ENTRE AMBOS
UNIVERSALES, DIRECTO Y REFLEJO.
-El universal reflejo, dice una relación explícita y positiva a muchos; la
relación, en el directo es implícita y negativa, en cuanto ese concepto no se coarta a un individuo, pero tampoco se refiere
explícitamente.
El universal directo es uno, como concepto o esencia expresada; pero, en cuanto a la individuación real, prescinde de unidad o multitud, no incluye,
ni una, ni otra. Y es claro; porque si inclu-
TRATADO PRIMERO, PARTE SEGUNDA. APOLOGÉTICA. P 407
yese unidad, no
podría verificarse en muchos, y si
incluyese multitud, no podría
hallarse en uno. El reflejo, uno en si mismo, incluye
multitud, en cuanto al término de la relación que exhibe es una naturaleza que
puede estar en muchos, como algo en lo
que todos convienen.
El universal reflejo presupone al directo y añade a éste, la relación a los
individuos. El reflejo se divide en
géneros, especies, diferencias, propios y acicdentes. Mas el directo, no es especie, sino principio de la especie en cuanto nos da
el elemento objetivo que se contiene
en la noción genérica o específica. Lo que se predica, por identidad, de éste o aquél sujeto, es el universal directo, no el reflejo; o mejor: se predica por
idntidad, el elemento objetivo que
contiene el universal directo y que no es, sino la naturaleza por sí indiferente a hallarse en uno o
en muchos individuos.
SE RESUELVE LA CUESTIÓN DE LA
REALIDAD DE SOS UNIVERSALAS. – El universal reflejo
no existe más que en el entendimiento.
Hemos visto, en lecciones
anteriores, que nada de lo que pertenece a la realidad individual, actual,
física, concreta, de una cosa, está en otra; la realidad es singular, luego lo universal, como tal, no es realidad.
Si se trata del universal directo, tal como lo hemos explicado,
todavía tenemos que distinguir en él dos cosas; primera, aquello que es concebido: el elemento objetivo, contenido en el concepto y expresado en
él; segunda, el modo como es
concebida esa esencia; es decir, su
precisión de las condiciones individuantes, su abstracción, su universalidad.
En cuanto al contenido y a lo expresado en el concepto, no podemos
negarle realidad: está realizado en las cosas, está en ellas, pertenece a su
realidad misma, por perfecta
identificación. Está en ellas individualizado,
concreto, físico.
En cuanto al modo de ser concebido, no está en ellas, sino sólo, en nuestra
mente. Porque en ellas está, como hemos dicho, concretado e individualizado, y
en la mente está abstractamente,
despojado de las condiciones individuantes.
Lo cual no daña la objetividad de nuestros conceptos universales.
Hace notar Santo Tomás, que los ojos ven el color de la manzana, sin el sabor
de la misma. El color es real, está en la manzana, determinándola a ser así, de ese color; en el sentido de la vista, está determinándole a
conocer eso; mas, en la manzana el color está con el sabor, y en la vista está
sin él. Esto depende de que el sentido de la vista está capacitado, por su
estructura orgánica, para recibir la influencia de la luz y del color, más no
la del sabor; y cada recipiente recibe lo que recibe, según el modo del
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modo del mismo recipiente, como hemos repetido en
explicaciones anteriores. Más, la mente humana, aunque es individual, está en
si misma, libre de la materia, de toda concreción material; por lo mismo, lo
percibido, es percibido libre de concreción material y de las condiciones
individuantes que impone la materia.
Así cuando digo “Pedro es libre”, no afirmo la identidad de
Pedro con el universal reflejo, y no quiero decir que Pedro es la libertad.
Pero lo que se contiene en el concepto universal directo de libertad, se
realiza en Pedro, identificado con su misma realidad; es la realidad de Pedro;
y por eso, en lugar del nombre abstracto de libertad, uso del nombre concreto
libre; y quiero decir que, lo que yo concibo por libertad, se galla en Pedro y
la entidad física de Pedro realiza en sí, por identificación, lo que se
significa en el adhetivo de libre, que es el contenido del concepto de
libertad.
OBJETAN LOS DEFENSORES DEL ONTOLOGISMO.-Los universales son
necesarios y eternos. Luego son el mismo Dios o sus ideas, expresión parcial de
su esencia.
Respondo, que debe distinguirse cuidadosamente el orden de
las esencias, y el orden de las existencias o hechos que realizan a aquellas.
Asimismo, la eternidad negativa, que prescinde de toda duración y la positiva
que es la realidad que excluye mudanzas y tiempo. Ahora bien; los universales
son necesarios, en el orden de esencias, según explicaremos ampliamente en el
Tratado siguiente; mas no lo son en el orden de la existencia. Son eternos, con
eternidad negativa, mas no con
eternidad positiva. Prescinden del hecho de la actual
existencia y de toda duración; no hay tiempo en el que no puedan existir realizarse; pero Dios no puede no existir. Y hay diferencia y distancia infinita, entre poder existir, y no como universales, y no poder no existir como tales.
DE LOS JUICIOS DE
EVIDENCIA INMEDIATA, Y, EN ESPECIAL, DE LOS AXIOMAS
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